miércoles, 31 de agosto de 2011

Quiero que me quieras por diosa y pordiosera


Quiero que me tomes de la mano en mitad de la fiesta,
cansado de brillar hasta el final,
que me des en la estación una sonrisa
y subas conmigo a dónde la vida nos quiera llevar.
Un pasamanos, un pasamontañas, un pasacebras,
un pasado mañana para estos sueños de alcanfor;
tu sexo, tu nariz, tu bicicleta, tu complicidad tras el telón
y en plena escena, mi cicatriz dibujando un corazón.
Cursi y no arrepentida,
Fatal y no perseguida,
Fiel y no consentida,
Real y no de mentira.

Quiero que me cubras el esqueleto con papel de celofán,
quiero que me corras paralelo, que ríamos y lloremos par a par;
quiero que me quieras por diosa y pordiosera,
made in tuya, made in man.

(lo que inspira Varona con un twit)

viernes, 26 de agosto de 2011

- a veces sabes algo sin saberlo aún y así es como lo sientes -

Miento si te digo que te amo sólo a ti
porque amo a toda tu ascendencia,
a los hermanos de tu madre,
a tu clan de caballeros,
abuelo Marcelino a la cabeza, a tu padre…
aunque de todos ellos sólo tú eres tú
pero también eres en ellos y ellos en ti.

Deberás disculpar que te ame por completo,
la paz de tu mirada, los hoyuelos,
la literatura donde encuentras la razón
y pierdes la cabeza,
la música que te inspira un son.

Miento si te digo que te amo sólo para mí
sé que no podrás anclarte en casa,
ni acostarte a la hora correcta,
ni dejar de ir y venir como un náufrago
en una isla desierta contándole a tu guitarra
tu cansancio de ser libre, de ser...

Miento si te digo que te amo sólo aquí,
detenido en este instante, inerte.
Yo también resisto a la misma humanidad y
camino por la playa sin un “Viernes”,
perdida tras las letras de un soneto
que no acaba de rimar.

Vagaré por nuestra casa hasta que vuelvas,
brindaremos en la víspera del día o en un bar,
a las peores horas, cada encuentro.

Como Reina y Rey - en el tablero - danzando - su destino…
Coincidir no es una ventaja que pueda inventarse,
sucede o no sucede como las tormentas eléctricas,
como las flores que se abren en primavera.
Está la lluvia y está el rayo, los pimpollos y el sol,
los puentes, mi doppelgänger, las águilas bicéfalas,
una bitácora, tu clan de caballeros, los mismos sueños,
una poesía, una palabra, una canción…
Soy la cuerda corriendo en paralelo por el mástil,
la sobremesa familiar, el ojal de tu camisa,
la línea superior de la palma de tu mano,
Machado de rodillas,
buscas como un naufrago, como he buscado yo.
Te lo pediré mil veces: invéntate una excusa,
llega hasta mí y detente, ve bajar la marea, siente,
coincidir no puede inventarse...
y aún no sabes quién eres en mi orilla.

martes, 16 de agosto de 2011

Extracto del Capítulo III "Los INIVISIBLES"

- Les diría que de cada refutación de una idea ha resultado un acuerdo. Muchas objeciones se hicieron presentes pero algunas se han convertido en coincidencias plenas, al menos ninguno de ustedes ha objetado sobre lo siguiente. Primero, “lo que hagamos tendrá que ver con la luz”. Nadie objetó que necesitamos colaborar para el desarrollo de algo que sea positivo, que tenga cualidades de expansión, que sirva para unir, para enlazar. Segundo, tenemos que apuntar a algo que pueda darse en sí mismo, que en su propia función sea un regalo para otros, un regalo que esos otros también necesiten compartir. Algo que sea humano pero que, como al río, le de igual a quien baña con el agua, el agua limpia a quien se sumerja en él sin distinciones. Lo mismo debe suceder con aquello que pensemos. Tercero, algo que una a los seres humanos con la vida, con la dignidad y con el honor de pertenecer y ser parte de la raza, pero no con el orgullo de ser “yo” sino con la integridad que les da ser “nosotros”, sin ganadores ni perdedores, sin peleas en el mismo tablero. Cuarto, disponemos de diez años y necesitamos resguardar nuestro anonimato, debemos ser uno más y no “ellos” señalados con el dedo, tenemos que enfocar nuestra energía en nuestro objetivo, el tiempo es acotado. Quinto, tenemos que pensar en algo que salga del “patio” de la casa de cualquiera y que pueda entrar y permanecer en el “patio” de la casa de cualquiera. Sexto, tiene que ser algo con efecto en cadena, como una plaga, algo espontáneo y natural, porque así podrá ser a largo plazo.

- Escucho a la piedra gritándonos desde sus entrañas, su propia forma. – dijo Sâleh, sereno - Un escultor respeta a la piedra y no acelera el trabajo que tiene que hacer con ella, sabe que el material se deja domesticar a su manera, como esos animales salvajes. Nosotros seremos muy distintos después de esto, la piedra también talla al escultor.

lunes, 8 de agosto de 2011

El Hilo de Ariadna

Me he quedado como la chica de tu historia
retrasando las llaves en la cerradura,
en ese breve instante de tu voz…
Alrededor el mundo se había desvanecido
y yo sola con mi timidez y tú enfrente,
soltando las pocas palabras que pude pronunciar
permaneciendo en tu mirada sin sombra,
amaneciendo.
¿Me llamarás algún día,
templarás mi frío,
ocuparás el asiento que está a mi lado
tendrán sentido todos los fracasos cuando te escuche respirar?
Invítame a cenar en la azotea,
haré desvanecer el ovillo, como Ariadna, con la esperanza
de que te tomés de él, leas "entrar en ti" y
sientas que esa, puede ser, nuestra salida.

miércoles, 3 de agosto de 2011

de útero a cenizas

Si pudiera volver a sentir como esa niña
perderle el miedo al mundo que ya ni recuerdo cómo es entregarse
cómo es el abrazo de quien te sabe bien
los huesos, los dolores, la fiebre a la mitad de la noche,
las canalladas sin malas intenciones,
la suerte de esperarte con la mesa tendida para el amor
que se posa en el milagro de los panes y los peces.
Si pudieras devolverme la inocencia que bebiste de a sorbitos
los ideales de izquierda que se me han caído en este gobierno
y en el anterior, en reconocer del mundo la siniestra.
El deber a la hora en que el despertador suena
y yo que casi me acercaba a vos soñando
con un chupetín en la boca del vaso de champan
que burbujeaba estrellas de pompones de bruma.
Ni siquiera puedo decirte que caí porque para eso tendría que haber subido,
no puedo decirte que el ratón son los padres con disimulo,
que la joroba del camello asomado en la ventana
era mamá tapada con una manta escondiendo los regalos
entre los zapatos que me apretaban los pies.
Perder todas las ilusiones para ver que no se puede vivir sin ellas…
Seguiré saliendo a mirar el cielo como todas las noches buenas
esperando que Dios se reinvente en leche tibiecita que alcance para todos.
Prefiero la poesía
a las noticias de la tarde sobre el hambre
y el odio y las razones de este mercader o el que le sigue.
Al fin y al cabo, después de la tempestad
la sortija espera para que demos una vuelta más,
otra vuelta de útero a cenizas.

Reset

Cuando te amé
hube pensado por fin que eso era amor
y que nada del amor había existido antes
que estaba a punto de aprender de una vez y para siempre
las cosas que el amor hacía en las personas que aman
que el alma podía perderse por la boca
que el sexo era prescindible e imprescindible
que te podía encontrar en cualquier rincón del mundo
porque me bastaba con mirar a cualquier lado
para mirarte.
Sentí que todos los tesoros estaban desenterrados
que el suelo era sólo para que apoyemos los pies descalzos
que los días y los años tendrían una continuidad exacta
donde no cabía la rutina, ni los sueños,
porque más allá de rutina y sueños íbamos los dos
tocándonos a veces, soltando sin disimulo
tanto amor amontonado reproduciéndose sin más
en el aire, en una flor, en cada paso.
Pero... ¿qué habrá pasado entonces?
¿qué conjuro del destino quiso separarnos?
¿o fuiste tú o fui yo? ¿o fue la causa última del abandono?
ya no te amo, es verdad, pero recuerdo a aquella que era yo
en ese entonces y que no sé a dónde fue
a la vera de qué camino ha cruzado la última estación
de este tren que me lleva a ninguna parte.
¿A dónde estás ahora que los árboles recuperan las hojas?
¿por qué no está tu nombre en la línea de mis manos?
¿por qué no somos una sola sombra hecha de dos? deshechos...
Ya no puedo encontrarte aunque te cruce por ahí
si hubiera un reset para este corazón sin maquillaje…