sábado, 12 de noviembre de 2011

Casandra

Si pudiera escribir la palabra que te conmueve,
la que te siembra la duda de venir hasta mi
abriéndote el corazón y el coraje
para que te dejes caer como fruta madura.

Si pudiera entregarte el fuego en garantía de los días por venir,
una trama poderosa que succiona como una tromba marina
para eclipsarnos en su centro y mantenernos a salvo.

Si pudiera escribir la palabra que te llama,
la que se cuela por tu costado más recóndito
acariciándote el alma y ese dolor del mundo
que llevas en los ojos, como otra piel.

Si pudiera entregarte todas las armas como un cheque en blanco
de que sobrará calor, alimento y cobijo para el niño que vive en ti,
para el hombre que vive en ti.

Tal vez esto sea plagio o presagio de una historia recitada al oído,
tal vez esa palabra fue escrita antes y olvidada después
para que podamos encontrar el camino...

C  A  S  I  O  P  E  A

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso poema, me ha gustado mucho.

Unknown dijo...

Muchas gracias!

Fernando Fantin dijo...

Si pudiéramos hacer todas aquellas cosas con las que soñamos entonces no nos quedaría espacio para seguir tejiendo ilusiones. Hermosos versos por cierto

Unknown dijo...

Fer, los sueños se reciclan... usamos uno y de los restos de ese más un poco de libertad y de condimento mundano y celeste, surge otro nuevo. Cuántos más sueños se cumplen, más sueños se tienen.

Por eso no dejo de buscar la palabra y si un día la encuentro, buscaré la palabra que pueda poner al mundo entero de fiesta. Mientras uno solo no se deje llamar habrá motivos para seguir soñando.

Gracias por pasar por acá!